J. Ignacio Mancilla*
Hace ya 24 años se instaló la
LVI Legislatura (1994-197); el sábado 1 de septiembre se hizo formal la LXIV Legislatura
(2018-2021). Legislatura que recibió el VI y último Informe de Enrique Peña
Nieto (EPN) y la que investirá como presidente de México a Andrés Manuel López Obrador
(AMLO), el próximo 1 de diciembre.
Han pasado ya 24 años; han
transcurrido 7 Legislaturas y un sinnúmero de legisladoras y legisladores:
uninominales y plurinominales.
Hoy quiero hacer un poco de
historia, de memoria, y destacar a una legisladora perteneciente a la LVI
Legislatura; fue diputada plurinominal e hizo un papel más que relevante como
diputada del Partido de la Revolución Democrática. Estoy hablando de Carlota
Botey y Estapé (1943-2011). Funcionaria también con el primer Jefe de Gobierno
de la oposición, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano en la Ciudad de México
(1997-1999); incluso con Rosario Robles Berlanga (interina, 1999-2000, hoy de
lamentable memoria), Andrés Manuel López Obrador (2000-2005), Alejandro Encinas
Rodríguez (interino) y Marcelo Ebrard Casaubón (2006-2012, quien la despidió de
una forma inmerecida e indigna).
Carlota Botey y Estapé (1943-2011). |
Me tocó en suerte recopilar y
prologar lo que fueron sus discursos en Tribuna, además de otro tipo de
intervenciones de ese periodo tan importante: 1994-1997.
Que yo sepa nadie ha hecho el
balance de ese lapso de la historia de las Legislaturas en México. Y nadie se
ha detenido, tampoco, a analizar el importante rol que jugó Carlota Botey ante
una mayoría priísta aplastante, 320 legisladores; 73 más de los que tendrá el
Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) en la LXIV Legislatura. A la que
le toca, por cierto, hacer la glosa y crítica del VI y último del gobierno de
Enrique Pela Nieto, como ya lo dije.
Espero que en términos de la
elaboración de Leyes esta Legislatura recién instalada sea, de verdad, un
parteaguas en la historia de México. Al igual que la presidencia, espero. Ese
fue el sentido del voto el pasado 1 de julio. Pero por lo visto el sábado 1 de
septiembre, los argumentos brillaron por su ausencia. De un lado y de otro.
Mientras tanto, conviene
resaltar alguna de las intervenciones de Carlota Botey, como aquella que
enunció el 10 de abril de 1997, en el 78 aniversario de la conmemoración del
asesinato de Emiliano Zapata, en el pleno de la H. Cámara de Diputados.
Su intervención la hizo a
manera de una carta personal dirigida al caudillo del Sur; y que, aparte de la
entrada y despedida, sostuvo en su parte esencial lo siguiente:
“[…]”.
“Al campo, no me lo va a creer
mi general, pero así es, pretenden ponerlo de nuevo en manos de los ricos.
Inventaron unas supuestas asociaciones mercantiles para controlarlo todo:
bosques, aguas, tierras, playas. El deseo de los poderosos es que el campo no
sea de los campesinos, sino del capital. De los dueños del dinero.
“Los vende patrias de ahora,
mi querido general, firmaron dizque un acuerdo comercial, Tratado de Libre
Comercio (TLC), para supuestamente ser más eficientes y más competitivos a
nivel internacional. Como consecuencia de ello, los productores de granos
básicos, de los alimentos para el pueblo, están condenados a desaparecer en un
plazo de quince años. ¿Le parece justo mi general?
“Pero la perversidad de los
neoliberales, en su tiempo se les conocía como <<científicos>> mi
general, llega muy lejos. Y se mide en el abandono financiero del campo; no hay
fertilizantes, ni crédito, ni asistencia técnica, ni comercial. Este abandono,
al parecer tiene la finalidad estratégica de que los campesinos, por hambre,
dejen sus tierras para que el capital se apodere de ellas. Solamente el diablo
puede imaginar tanta maldad, ¿verdad mi general?
“Debido al abandono en que el
Estado tiene al campo, mi general, los campesinos no obstante su gran amor por
la tierra y los recursos naturales, se han visto obligados a abandonar su casas
para ir en la búsqueda del trabajo que no les ofrece su país. ¿Y qué es lo que
encuentran, mi general? Por lo regular rechazo, discriminación y hasta la
muerte.
“Y el Gobierno, en lugar de
defender a los campesinos de ahora, como un tiempo lo hizo con nuestros
abuelos, lo único que ofrece es el finiquito del rezago agrario, que no es otra
cosa que el punto final del acceso a la tierra por parte de los campesinos.
Además del PROCEDE, programa de titulación y principio de la privatización de
la tierra que hoy está en manos del sector social.
“Aunado a todo esto, mi
general, le hago un breve recuento, a manera de muestra, de una parte de los
acontecimiento que confirman que lo que le escribo no es otra cosa que la
verdad, mi querido general.
“[…]”.[i]
Así decía esa
carta/intervención parlamentaria, que no pretendía otra cosa que reivindicar a
las y los campesinos de México; a los campesinos del sector social. Y es que
Carlota Botey fue una agrarista de hueso colorado. Y fue desde ahí, desde ese su
agrarismo radical, que siempre intervino en el pleno de la H. Cámara de Diputados
de la LVI Legislatura.
Ahora que las cosas pueden
cambiar, dejo constancia de algo que en su momento el PRD despreció, dejando
que se perdiera todo el trabajo que hizo esta brillante mujer en la LVI
Legislatura, abandonando esta valiosa trinchera que fue la Comisión de la
Reforma Agraria; la que Carlota Botey presidió y desde la que todo el tiempo
reivindicó el sector social del campo mexicano. De ahí el título de sus
intervenciones, Zapata de principio a fin.
Portada de Zapata de principio a fin. |
Y es que… la historia de la
LVI Legislatura, que fue tan importante, sigue como una tarea pendiente.
Como sigue pendiente, también,
la reflexión sobre el rol que desempeñó Carlota Botey, congruente como pocas y
pocos legisladores; estoy pensando en las y los legisladores de todos los
partidos, pero sobre todo en los legisladores del PRD. Lamentablemente.
Que conste, esto que hoy les presento
sobre la LVI Legislatura y en especial sobre Carlota Botey, es apenas un
pequeño apunte de una historia pendiente y que para mí sigue siendo un
compromiso que espero pronto tramitar.
P. D. De VI Informes
Como presidenta de la Comisión
de la Reforma Agraria, Carlota Botey asumió su papel con enorme relevancia y
dignidad. En la glosa del VI y último Informe del repudiado Carlos Salinas de
Gortari, de infausta memoria, hizo un desglose crítico, como pocos; y en su
respectiva intervención sostuvo:
“El 27 de noviembre de 1991,
como respuesta a la convocatoria de un debate que no lo fue, sino simple
monólogo sobre el Artículo 27, desde esta misma tribuna intervine para advertir
sobre los peligros de modificar la legislación agraria postrevolucionaria que
estableció un pacto social entre el Estado mexicano y los campesinos de este
país.
“Señalé entonces que las
reformas al Artículo 27 Constitucional que ponían fin al reparto agrario y
privatizaban el ejido y las tierras comunales, iban a provocar una situación de
inestabilidad y de violencia social. Hoy, dos años después, los hechos,
lamentablemente, nos ha empezado a dar la razón en Chiapas, en donde ha surgido
un levantamiento indígena y campesino que explícitamente repudia las reformas
salinistas al Artículo 27 Constitucional”.[ii]
Carlota Botey abría esa su
intervención, que se dio el 5 de noviembre de 1994 en el pleno de la H. Cámara
de Diputados así:
“Según dice James Joyce,
existe un soñado país donde todos mienten más de lo que hablan. Naturalmente
que el famoso escritor irlandés no se refería a México, ni mucho menos a sus
informes presidenciales. Y porque James Joyce no se refirió a México y a sus
informes presidenciales, yo, Carlota Botey, me veo obligada a venir aquí, ante
los representantes del pueblo mexicano para hablar y no mentir”.[iii]
Conviene, pues, que regresemos
a esas intervenciones parlamentarias cuando, hoy, la retórica de Enrique Peña
Nieto (EPN) ha alcanzado dimensiones inauditas de incredulidad absoluta, esto
con su: “dejo un país mejor del que recibí hace 6 años” (La Jornada, 04/08/2018).
Así las cosas.
Ojalá que las y los
legisladores de la LXIV Legislatura pertenecientes a MORENA (Movimiento de
Regeneración Nacional) sepan estar a la altura de los tiempos; pues tienen
historia de la cual echar mano.
Andrés Manuel López Obrador y Carlota Botey. |
*J. Ignacio Mancilla.
[Ateo, lector apasionado,
militante de izquierda (casi solitario).
Lacaniano por convicción
y miembro activo de Intempestivas,
Revista de Filosofía y Cultura.]
[i]
Botey, Carlota, Zapata de principio a
fin. Intervenciones parlamentarias, discursos y conferencias, H. Cámara de
Diputados/LVI Legislatura, México, 1997 (p. 122).
[ii]
Ídem, pp. 11-12.
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